LOS PSICODÉLICOS ABREN UNA NUEVA ERA EN EL TRATAMIENTO DE LAS PATOLOGÍAS MENTALES

Tengo que admitir que yo que escribo casi un artículo diario en mi blog la mayoría de ellos o son copiados o por lo menos inspirados de los medios de difusión.

Desde que uso internet, pocas veces leo aticulos y libros, y si cada dias, encuentro articulos muy bien presentados y que por lo menos a mi me gustan y que Dios me perdone y además son de revistas muy CIENTIFICAS Y CONSAGRADAS. Los trabajos de Internet.

Pero lo que me cuesta mucho es ver como la mayoría de las enfermedades psíquicas que se repiten, no sabemos de que van ni que tejidos la soportan y están lesionados y que funciones se alteran.

Y lo que más me confunde son las variadas la nominaciones de las patologías.

Estrés postraumatico es utilizado tanto como “futbol” y es tan plural, que nos contentamos con nominarlo. Pero ni sabemos que esta alterado o todas la estructuras lesionadas o como una lesionan va desencadenando mas lesiones a su vez.

Exijo conocer mas la función cerebral y la fisiopatología de las entidades patologicas. Sin esto “apaga y vamos”

Vamos que yo veo venir, o mejor que ya esta aquí una nueva forma de manifestarse y de publicar y por supuesto esto no solo cambia la forma, y la rapidez sino el contenido.
Magníficos investigadores están enamorados del saber y tienen la generosidad y la necesidad de divulgarlos.

Si divulgarlos y les importa un bledo los premios y los comentarios, pero no se resisten a publicar e internet se lo pone fácil..

Y su osadia les lleva a buscar .

Este articulo de la Vanguardia que resumo, muy poco cientico, publica la utilidad de los psicodélicos en procesos psíquicos. Y que sepamos que no hace mucho tiempo estaban perseguidos. Y aun lo están.

Es verdad que la pléyade de al Referencias. Hacen pensar.

1. ↑ http://www.muyinteresante.es/salud/articulo/asi-actuan-las-setas-magicas-en-el-cerebro (2012). David Nutt

2. ↑ Saltar a:a b «Los 6 tipos de psicodélicos y sus efectos». Consultado el 4 de diciembre de 2020.

3. ↑ Saltar a:a b Kyzar, Evan J.; Nichols, Charles D.; Gainetdinov, Raul R.; Nichols, David E.; Kalueff, Allan V. (1 de noviembre de 2017). «Psychedelic Drugs in Biomedicine». Trends in Pharmacological Sciences (en inglés) 38 (11): 992-1005. ISSN 0165-6147. doi:10.1016/j.tips.2017.08.003. Consultado el 4 de diciembre de 2020.

4. ↑ de Vos, Cato M. H.; Mason, Natasha L.; Kuypers, Kim P. C. (10 de septiembre de 2021). «Psychedelics and Neuroplasticity: A Systematic Review Unraveling the Biological Underpinnings of Psychedelics». Frontiers in Psychiatry 12: 724606. ISSN 1664-0640. PMC 8461007. PMID 34566723. doi:10.3389/fpsyt.2021.724606. Consultado el 27 de diciembre de 2021.

5. ↑ F.J., Carod-Artal (1 de enero de 2015). «Hallucinogenic drugs in pre-Columbian Mesoamerican cultures». Neurología (English Edition) (en inglés) 30 (1): 42-49. ISSN 2173-5808. doi:10.1016/j.nrleng.2011.07.010. Consultado el 6 de enero de 2021.

6. ↑ http://global.britannica.com/EBchecked/topic/481540/psychedelic-drug

7. ↑ http://www.ehow.com/facts_5890054_history-psychedelic-drugs.html

8. ↑ «LSD-Assisted Psychotherapy». MAPS (en inglés británico). Consultado el 23 de septiembre de 2018.

9. ↑ «The New Science of Psychedelics» (en inglés estadounidense). Consultado el 23 de septiembre de 2018.

EE.UU. podría aprobar el uso de éxtasis para el estrés postraumático a finales de 2023

Los ensayos con psilocibina, MDMA y otros alucinógenos se intensifican en España

Nace la Sociedad Española de Medicina Psicodélica para velar por una buena práctica clínica

Uso de psicodélicos en terapia de salud mental- Profesionales que ejercen esta disciplina en la habitación habilitada para este uso en Centro dependiente de Sant Joan de deu ,. De Izda a dcha- , Oscar Álvarez ( investigador principal)Rosa Dueñas, Núria Tous y Carmen Arévalo.

Óscar Álvarez, Rosa Dueñas, Núria Tous y Cristina Domènech, el equipo de psicoterapeutas del Parc Sanitari Sant Joan de Déu que probará el tratamiento con éxtasis para el estrés postraumático

David Nutt habla de la sustancia activa de algunas drogas psicodélicas, la cual es la psilocibina, que provoca la reducción de la actividad en las zonas del cerebro que tienen conexiones más densas con otras regiones de la materia gris, debido a que se desactivan estas regiones, conducen a un estado en que el mundo que rodea a la persona se percibe de manera extraña.

Normalmente las drogas psicodélicas que poseen psilocibina son hongos. La intensidad y duración del efecto enteogénico de los hongos psilocibios es altamente variable, dependiendo de las especie del hongo, la dosis, las características fisiológicas individuales y del entorno.2

Sus efectos son extremadamente variables y dependen de la cantidad que se consume, el entorno en que se use la droga, la pureza de ésta, la personalidad, el estado de ánimo y las expectativas del usuario. Aun así, generalmente se les atribuyen alteraciones profundas en la percepción de la realidad y el estado de consciencia, como la sensación que el cuerpo y la mente están separados, sentidos amplificados e incluso alucinaciones.3

Un reciente estudio sobre el LSD en adultos sanos reveló aun aumento de humor positivo así como de alteraciones de imágenes visuales que alcanzó su máximo de 1 a 5 horas después de la administración, contrariamente a las pruebas hechas con placebo. Adicionalmente, el LSD aumenta moderada y transitoriamente el pulso, la presión arterial, temperatura corporal, niveles plasmáticos de cortisol, prolactinaoxitocina y epinefrina.4​ Algunos consumidores de LSD experimentan una sensación de euforia, mientras que otros viven la experiencia en clave terrorífica. Cuando la experiencia tiene un tono general desagradable, suele hablarse de un «mal viaje«.

Vamos que esto actúa como una droga y es una droga

La psilocibina produce un aumento similar del buen humor y muestra una inclinación a hacer evaluaciones positivas de los estímulos recibidos.4

Entre los efectos fisiológicos están los siguientes: contracciones uterinas, fiebre, niveles elevados de glucemia, neuroplasticidad,5​ erizamiento del vello, aumento de la frecuencia cardíaca, transpiración, pupilas dilatadas, insomnio, parestesia, hiperreflexia y temblores.

Tipos de drogas psicodélicas

Entre de las drogas psicodélicas más comunes se encuentra el LSD, 1P-LSD, mescalina o peyote, psilocibina o setas mágicas y DMT.3

Dentro de las drogas psicodélicas también se encuentran: Hongos psilocibiosLophophora williamsii (conocido como peyote), Echninopsis Pachanoi (conocido como Cactus de San Pedro), 2C-B, 4-HO-MET, 4-HO-MiPT, Estofaria verde, Rapé dos indios, Ayahuasca e Ipomoea purpurea.

Los hongos psilocibios y el peyote se utilizaban en el nuevo mundo antes de la llegada de los españoles.6

Las drogas psicodélicas lograron su más amplia popularidad durante la década de 1960 y principios de los 70, cuando las drogas como el LSD fueron centrales en la subcultura «hippie» en Europa occidental y los Estados Unidos.7​ Aunque los fármacos disminuyeron en popularidad, conservaron muchos seguidores en algunas regiones y culturas y ha logrado una popularidad renovada durante los años 1990, cuando el LSD y el éxtasis tenían una juventud significativa después en los Estados Unidos y Europa. 8​Durante la década de 1990, el LSD hizo algo de una reaparición como el éxtasis, una droga nueva «fiesta». El éxtasis también se hizo muy popular en Europa, más tarde en los Estados Unidos.

Actualmente, MAPS (Multidisciplinary Association for Psychedelic Studies), una organización no lucrativa, busca impulsar la investigación sobre el uso terapéutico de sustancias psicodélicas y marihuana, que se desarrolla en contextos médicos, legales y culturales para informar a la gente sobre sus riesgos y beneficios. Respondieron (la mayoría por el fundador Rick Doblin) más de 100 preguntas de aproximadamente dos mil que recibieron en el sitio web AMA (Ask Me Anything), donde se discutieron los beneficios y daños que pueden ocasionar las drogas psicodélicas, además de hablar de varios estudios que han realizado y sobre una posible legalización a largo plazo de algunas drogas.910

Los tratamientos con psicodélicos están iniciando el salto del mundo de la investigación al de la práctica clínica, abriendo con ello una nueva era en el tratamiento de las patologías mentales.

“Estamos asistiendo a un cambio de paradigma a la hora de tratar los trastornos mentales: de un paradigma más biologicista centrado en atacar el síntoma, a otro que lo que intenta es transformar el curso de la enfermedad; estamos yendo de un tratamiento farmacológico crónico, diario y de por vida, a un tratamiento puntual que, acompañado de psicoterapia, permite remitir los síntomas sin seguir medicándose”, explican los psiquiatras.

Óscar Soto y Óscar Álvarez, presidente y secretario  de la recién constituida Sociedad Española de Medicina Psicodélica (SEMPSi), entidad que ha solicitado hace unas semanas su inscripción en el registro del Ministerio del Interior y que tiene como objetivo divulgar información científica veraz sobre estos nuevos fármacos y establecer guías clínicas y códigos de buenas prácticas para su uso terapéutico.

“EL TÉRMINO PSICODÉLICO SIGNIFICA REVELADOR DE LA MENTE; SON SUSTANCIAS QUE PROVOCAN ESTADOS ALTERADOS DE LA MENTE

Santiago Madero, psiquiatra especializado en psicodélicos del hospital Clínic, apunta que los psicodélicos son un tipo concreto de sustancias alucinógenas que durante miles de años se han usado en rituales espirituales y que tienen potencial terapéutico “porque permiten acceder a memorias y recuerdos del subconsciente, no aparentes en un primer plano mental”.

Cuando aun no sabemos donde y como se almacena la memoria y en consecuencia los recuerdos, una opción, es “ a ver que pasa”

Se indican en: la depresión el estrés postraumático o las adicciones

“Las investigaciones realizadas en la última década ofrecen resultados muy positivos para tratar casos de estrés postraumático, la ansiedad y la depresión en enfermos terminales, la depresión resistente, el alcoholismo o el tabaquismo”, resume el doctor Álvarez, investigador y psiquiatra en el Parc Sanitari Sant Joan de Déu.

Soto apunta que la etiqueta psicodélicos se aplica para diferentes sustancias y con mecanismos de acción diferente. “La psilocibina, que se extrae de los hongos psilocibes y es una de las sustancias que más se ha investigado, se ha probado para la depresión resistente, pero también se ha estudiado con resultados prometedores en personas con trastornos obsesivos compulsivos, de la alimentación, para adicción al alcohol y al tabaco”, ejemplifica.

Horizontal

La ayahuasca está considerado uno de los alucinógenos más potentes

se ha probado para prevenir el duelo prolongado, en personas con trastorno límite de la personalidad y también para depresión; mientras que el MDMA o éxtasis “muestra resultados robustos para tratar el estrés postraumático”, agrega Soto.

Los especialistas consultados explican que, aunque cada sustancia es diferente tanto en lo que se refiere a los efectos que produce como a la duración de los mismos, los psicodélicos clásicos (entre ellos la psilocibina o la ayahuasca) actúan sobre los receptores de serotonina 5HT2A, lo que incrementa la conectividad entre distintas área del cerebro y modula la inflamación.

“Junto a ese efecto más neurobiológico –y probablemente como consecuencia de él– se produce un estado de conciencia alterado y de disolución del ego que permite conectar mejor con las emociones, revisar recuerdos pasados, vivir experiencias místicas y de conexión con la naturaleza y con la totalidad”, apunta el investigador del VHIR.

Un antidepresivo modula, como cuando subimos o bajamos el volumen de la radio; el psicodélico es como si abriéramos la radio

Óscar ÁlvarezPsiquiatra e investigador principal Parc Sanitari Sant Joan de Déu

Lo que dejan claro los especialistas es que funcionan de forma radicalmente distinta a los fármacos convencionales usados hasta ahora en psiquiatría.

El doctor Álvarez lo explica de una forma muy gráfica: “Un antidepresivo o un estabilizador del humor actúa reduciendo la intensidad de la emoción o de la angustia, como cuando subimos o bajamos el volumen de la radio; el psicodélico cambia la percepción del paciente, es como si abriéramos la radio para ver qué circuitos hay que cambiar para que la música suene mejor”.

En España, el consumo privado de sustancias de origen natural como la ayahuasca o los hongos alucinógenos de los que se extrae la psilocibina es legal, pero no así su uso como terapia. La única sustancia de este tipo que ya tiene autorización para usarse como fármaco es la esketamina, indicada para la depresión resistente y con la que se está tratando a personas que ya han probado al menos tres tratamientos antidepresivos convencionales sin éxito.

La esketamina, también conocida como ketamina, es un fármaco aprobado para tratar a pacientes con depresión resistente

Llibert Teixido

En Estados Unidos, donde los ensayos clínicos van más avanzados, algunos estados como Connecticut, Colorado u Oregon ya han autorizado también centros de terapias con sustancias naturales que permiten tratar con psilocibina.

Y se espera que la FDA, la agencia responsable de regular los medicamentos, pueda aprobar la comercialización y uso médico del MDMA o éxtasis para tratar el estrés postraumático a finales de 2023 o principios de 2024, dado que ya se dispone de los resultados del segundo estudio clínico en fase III de esta sustancia en Estados Unidos, que era el requisito que quedaba para tramitar su aprobación, apunta Madero, que es vicepresidente de la SEMPSi.

Permiten acceder a memorias y recuerdos no aparentes en un primer plano mental

Santiago MaderoPsiquiatra H. Clínic, vicepresidente Sociedad Española de Medicina Psicodélica

En Europa la regulación de este uso terapéutico del éxtasis va más retrasada. En 2023 se iniciarán de forma simultánea ensayos en fase II y III, de modo que la aprobación por parte de la Agencia Europea del Medicamento no llegará hasta finales de 2026 o 2027. En esas pruebas participarán pacientes del equipo de Sant Joan de Déu que encabeza el doctor Álvarez.

El siguiente psicodélico que podría dar el salto a las consultas de psiquiatría es la psilocibina. En Canadá ya se ha aprobado su uso compasivo para tratar el miedo a la muerte en personas con cáncer. En el hospital de Vall d’Hebron, el equipo de Soto iniciará en abril un ensayo en fase III (el último previo a la solicitud de aprobación) para verificar su efectividad en el tratamiento de la depresión.

Un poco antes, en febrero o marzo, los servicios de psiquiatría de Vall d’Hebron y el Clínic probarán la eficacia otro alucinógeno, el 5-MeO-DMT, para abordar la depresión resistente. “Se trata de un ensayo en fase II dirigido a determinar cuál es la dosis óptima”, detalla Madero.

Algunos resultados

Esketamina: 51% de remisión en casos depresión resistente

Esketamina. El 69% de las personas con depresión resistente responden al tratamiento con esketamina, y la tasa de remisión es del 51%, según explica el doctor Óscar Soto Angona, que utiliza este fármaco en el hospital Vall d’Hebron.

Psilocibina. Dos dosis reducen el consumo excesivo de alcohol un 83% entre los bebedores compulsivos (la mitad dejó de beber por completo), según un estudio realizado en Estados Unidos.

Éxtasis. El primer ensayo clínico en EE.UU. mostró que, al cabo de dos meses de tratamiento con MDMA y terapia de conversación, los síntomas de estrés postraumático habían remitido y el 67% de los participantes ya no reunía los requisitos para ese diagnóstico.

Ayahuasca. Provoca un estado de conciencia modificado que potencia el proceso psicoterapéutico del trauma y de trastornos relacionados con el control de las emociones, según estudios de Elisabet Domínguez-Clavé, psiquiatra del hospital de Sant Pau.

¿Cómo se utilizan?

Son catalizadores para la psicoterapia

Los psiquiatras consultados explican que los psicodélicos, más que fármacos que curan, son “catalizadores de la psicoterapia”, una herramienta para que la persona consiga conectar mejor con sus emociones y cambie su perspectiva respecto a su propia vida y respecto al mundo.

Enfatizan que, a diferencia de los fármacos convencionales, los tratamientos con psicodélicos tienen muy en cuenta al paciente, hacen que se establezca un vínculo fuerte y de confianza con el psicoterapeuta, que es quien le acompaña y le ayuda a prepararse para lo que vivirá durante la sesión en que toma la sustancia y también quien después le ayuda a integrar lo vivido en forma de cambios en su vida.

De los alucinógenos a la realidad virtual

La red de Salud Mental del Parc Sanitari Sant Joan de Déu inaugurará en 2023 una unidad de tratamientos innovadores dirigida a explorar soluciones para aquellas personas con problemas de salud mental que no responden a los fármacos o terapias convencionales. En ella se ofrecerán desde terapias asistidas con psicodélicos a tratamientos con realidad virtual. “Será un centro en el que además de ofrecer tratamientos clínicos haremos investigación para explorar nuevas áreas, para probar confluencias entre los rituales con alucinógenos, las psicoterapias y las nuevas tecnologías, y dónde podremos juntar diferentes proyectos de áreas punteras del desarrollo científico con el objetivo de tratar casos resistentes”, explica el investigador principal y psiquiatra del Parc Sanitari Sant Joan de Déu, Óscar Álvarez.

Aunque las sesiones de tratamiento varían en función de la sustancia, el doctor Álvarez explica que suele haber tres visitas de preparación para establecer ese vínculo, resolver dudas y miedos, explicar a la persona qué puede esperar durante ciertos momentos de la experiencia y estrategias para manejarse en ellos, y trabajar la intencionalidad de la sesión con psicodélicos.

Uso de psicodélicos en terapia de salud mental- Profesionales que ejercen esta disciplina en la habitación habilitada para este uso en Centro dependiente de Sant Joan de deu , Detalle de la habitación tal cual la ambientan para el tratamiento

Habitación donde se realizan las sesiones con psicodélicos en el centro de salud mental de Sant Joan de Déu, donde tanto la luz como la música se controlan para favorecer la experiencia del paciente

Ana Jiménez

Esa sesión, la de la administración del fármaco, se realiza en una habitación agradable y cómoda, dotada de sofá o cama, con la música como hilo conductor y la presencia de dos terapeutas (normalmente psiquiatras o psicólogos formados específicamente para trabajar con personas con estados modificados de conciencia) que están al tanto de cualquier inquietud o necesidad que pueda tener el paciente durante su experiencia con los alucinógenos.

“Por último, se realizan sesiones de integración, que varían según la sustancia, para llevar lo vivido a lo práctico, a interpretar y aplicar todo lo que ha ocurrido cuando se tomó la sustancia”, apunta el psiquiatra e investigador de Sant Joan de Déu.

¿Qué riesgos tienen?

Exceso de expectativas y uso fuera del ámbito clínico

Los especialistas consultados aseguran que, usados en un entorno clínico y con la adecuada planificación, el tratamiento con psicodélicos tiene un alto perfil de seguridad y el riesgo de efectos secundarios graves se minimiza. No obstante, coinciden en señalar dos grandes riesgos respecto a estos tratamientos: el exceso de expectativas y el uso de estas sustancias fuera del ámbito clínico.

“No actúan igual en todos los casos; la mejoría clínica depende del estado mental de la persona que toma el psicodélico, de su preparación, de sus expectativas, de su pasado y de con quién lo toma, en qué espacio físico o con qué música lo acompaña; por eso el acompañamiento psicoterapéutico es fundamental y su uso fuera de la clínica, en el ámbito lúdico, puede conllevar riesgos asociados”, comenta Soto.

La mejoría depende del estado mental de la persona, de su preparación y de con quién lo toma, en qué espacio o con qué música

Óscar SotoPsiquiatra H. Vall d’Hebron, pte Sociedad Española Medicina Psicodélica

Madero explica que los criterios de inclusión de los pacientes en estos tratamientos son muy estrictos y, actualmente, están contraindicados en personas con trastorno bipolar o esquizofrenia o con antecedentes familiares de esas enfermedades.

Por otra parte, los tres psiquiatras recuerdan que, aunque los resultados preeliminares son muy prometedores, el potencial terapéutico, las dosis y el modelo de abordaje psicoterapéutico con estas sustancias aún está en estudio, “así que hay que ser realistas y prudentes”.

Me da mucho miedo ser atrebvido, pero como cirujno, no puedo oprrra algo que no tenga un sustrato anatomicco, las alteraciones fuiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiicionales de una utilidad extrordinasria, como la pilepsia , doloress y un lasrgo etc. Nos paran un poco y lo han hech a lo largo de siglor y todavía tienen sus detractores.

En mi larga vida como neurocirujano, he visto como se enriquece el conocimieto y el bien hace.

Pero

“Qué poco avanzamos en la organicidad de los procesos Psiquicos”.

Referencias[.

 http://www.muyinteresante.es/salud/articulo/asi-actuan-las-setas-magicas-en-el-cerebro (2012). David Nutt

↑ Saltar a:a b «Los 6 tipos de psicodélicos y sus efectos». Consultado el 4 de diciembre de 2020.

↑ Saltar a:a b Kyzar, Evan J.; Nichols, Charles D.; Gainetdinov, Raul R.; Nichols, David E.; Kalueff, Allan V. (1 de noviembre de 2017). «Psychedelic Drugs in Biomedicine»Trends in Pharmacological Sciences (en inglés) 38 (11): 992-1005. ISSN 0165-6147doi:10.1016/j.tips.2017.08.003. Consultado el 4 de diciembre de 2020.

 de Vos, Cato M. H.; Mason, Natasha L.; Kuypers, Kim P. C. (10 de septiembre de 2021). «Psychedelics and Neuroplasticity: A Systematic Review Unraveling the Biological Underpinnings of Psychedelics»Frontiers in Psychiatry 12: 724606. ISSN 1664-0640PMC 8461007PMID 34566723doi:10.3389/fpsyt.2021.724606. Consultado el 27 de diciembre de 2021.

 F.J., Carod-Artal (1 de enero de 2015). «Hallucinogenic drugs in pre-Columbian Mesoamerican cultures»Neurología (English Edition) (en inglés) 30 (1): 42-49. ISSN 2173-5808doi:10.1016/j.nrleng.2011.07.010. Consultado el 6 de enero de 2021.

 http://global.britannica.com/EBchecked/topic/481540/psychedelic-drug

 http://www.ehow.com/facts_5890054_history-psychedelic-drugs.html

 «LSD-Assisted Psychotherapy»MAPS (en inglés británico). Consultado el 23 de septiembre de 2018.

 «The New Science of Psychedelics» (en inglés estadounidense). Consultado el 23 de septiembre de 2018.

 

Ana Jiménez

MAYTE RIUS

10/12/2022 06:00Actualizado a 10/12/2022 11:32

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