El cerebro: emociones, sentimientos y sensaciones

Nos cuesta diferenciar entre sensaciones emociones y sentimientos se

sienten en el cuerpo no se piensan y cuando se piensan son pensamientos pero no sentimientos, que solo lo son cuando persisten.

Entendemos por SENSACIÓN la impresión meramente física pero hay algunas más físicas que otras

por ejemplo el frío el calor y hay otras más sutiles cambiantes o más a flor de piel o más internas diferentes grupos de sensaciones en diferentes partes del cuerpo.

Estas son la EMOCIONES que son la respuesta que aparece después de la percepción de la sensación

Son bruscas en general y en ellas no interviene la parte racional podríamos decir que se trata de la primera reacción frente a una situación antes de actuar con un pensamiento asociado al tratarse de estados afectivos

Nos indican necesidades deseos motivaciones ilusiones etc cada persona experimenta una emoción de forma particular dependiendo de sus experiencias pasadas de sus aprendizajes de su carácter de sus actitudes y creencias.

Estos son los SENTIMIENTOS, que ni son voluntarios ni modificables con los métodos naturales, la voluntad.

El sentimiento es la expresión mantenida en el tiempo de las emociones

Se pueden definir los sentimientos como la persistencia de la alarma en los seres vivientes.

A pesar de lo complejo de ese sistema lo poseen los seres vivientes incluso aquellos que aún no tienen sistema nervioso como son las los unicelulares.

De manera que a medida que una sensación a través de la percepción hasta llegar al sentimiento y hacerlos crónico, un mar de dudas y versiones nos permiten el desconcierto y sobre todo de los románticos que creen que todo se resuelve con educación.

Y este tema es tan importante qué es el actor principal en la cantidad de desmanes psiquiátrico que está sufriendo nuestra población. Las agresiones en forma de emociones no son fácilmente digeribles con la voluntad y ni siquiera con los medicamentos y nos conducen a estados terribles de enfermedades mentales que son la verdadera respuesta al desequilibrio universal o a un estadío de la evolución.

Reescribo sobre este tema porque me preocupa enormemente y sobre todo porque un atrevido grupo de intelectuales y no solamente sanitarios piensan que la educación y la voluntad son capaces de modificar los sentimientos.

No hay voluntad que redima el dolor que produce las secuelas de un HERPES U OTRAS PATOLOGIA NOCICEPTIVAS,  a no ser que se utilicen medias terapéuticas y aun ASI NOS LAS VEMOS Y NOS LAS DESEAMOS.