COMO bajar la presión arterial y  mantenerla en sus valores normales. Sin medicamentos y de forma natural. Y esto va más allá de la dieta, te explicaré  qué comer, sí!, y qué no debes comer, también! Pero también te diré cuál es el té ideal  para que bajes tu presión arterial.
Y luego es posible que ya  no necesites medicamentos, con este comportamiento alimentario,  que te hará una persona nueva. Porque la medicina arregla las cosas.  Pero es mejor prevenir que curar, así que si no necesitamos  medicamentos, mucho mejor. La presión arterial alta es silenciosa, e incluso puede hacerte daño sin siquiera  mostrar síntomas, y por esto es muy grave.
Porque te puede provocar un ACV sin que ni  siquiera sepas que tienes presión arterial alta. Por esto, si sabes que tienes tendencia  a que tu presión arterial se eleve, debes mantenerla bajo control, haz todo lo posible  para mantener la presión arterial bajo control. La presión puede provocar un ACV, pero  también puede provocar un ataque cardíaco y,
con el tiempo, si no se cuida la  presión, puede provocar insuficiencia cardíaca, e incluso ocasionar daños  irreversibles en el riñón, por ejemplo. Es decir, la hipertensión arterial es grave, hay que tratarla y no siempre necesita  medicación y por eso estoy aquí. Te contaré todo lo que puedas saber y  hacer para que tu presión arterial esté
bajo control y no te ocasione  daños ahora ni en el futuro. Nunca se sabe en qué momento exacto  tu presión arterial puede estar alta. Algunos síntomas comunes que ocasiona  la hipertensión son: dolor de cabeza (especialmente en la nuca), hemorragia nasal,  mareos, malestar e incluso pérdida de memoria.
Si mides tu presión arterial y está por encima de  12×8, ¡Significa que está alta y hay que bajarla! No es un juego… Lo que pasa es que tus arterias  tienen la capacidad de relajarse y contraerse según la cantidad  de sangre que pasa por ellas. Y esto hace que el control de la presión  esté siempre dentro de lo que dijimos, hasta 120 por 80, que es una presión normal. Cuando la presión aumenta,  significa que tus arterias no pueden manejar la cantidad  de sangre que pasa por allí. Cuando la presión aumenta  es necesario disminuirla, porque mientras más aumenta esta  presión y más aumenta esta presión, la arteria va perdiendo elasticidad o la  capacidad de relajarse, y se puede estallar.
Una de las principales causas de la  hipertensión arterial es la obesidad. Y si en el pasado teníamos adultos  más maduros en el consultorio, a partir de los 60 años, era natural  que su presión fuese más necia. Pero actualmente se ha visto que niños, adolescentes y adultos jóvenes con  obesidad tienen la presión alta.
Y recuerda, mientras más joven  desarrolles presión alta, más difícil resultará a lo largo de tu  vida controlar esa presión arterial. De ahí la importancia de controlar y mantener  esta presión, de crear buenos hábitos para que esta presión no sea un tormento  a lo largo de la vida, ¿me expliqué? Si quieres saber cada kilo que bajas  de peso, disminuyes un puntito ahí,  en el numerito de la presión. ¡Es  de inmediato! Es cierto, creeme… Ahora, la mejor dieta que puedes hacer  para mantener tu presión bajo control es una dieta llamada DASH, que es una dieta  para deshacerse de la hipertensión en sí. Dietary Approaches to Stop Hypertension (Enfoques Alimenticios para
Entonces, ¡es una buena  dieta, créanme! Por ejemplo: imagina que para el desayuno tienes una taza  de yogur natural con cereales integrales. Súper alto en fibra, ¿qué más? Calcio, que es genial. ¿Qué más hay en el  cereal? Magnesio y potasio, excelente. Y si quieres aumentar la cantidad de  minerales, pones una baya como el arándano. 03:29
Mientras más oscura sea la baya que pones  allí, más antioxidantes tiene para tus venas, para tu salud, para que tu  presión arterial esté bien. Otra cosa interesante,  imagínate en el almuerzo … Para el almuerzo puedes preparar unas espinacas  salteadas, las hojas oscuras tienen mucho potasio. El potasio captura la sal (el sodio) y lo  envía fuera de tu cuerpo, necesitas esto.
Hojas oscuras, la reina es la hoja del  betabel, pero si no tienes esta hoja, puedes usar las espinacas, la rúcula,  una ensalada de rúcula también funciona. ¡¿Y con qué lo acompañarás?! Con un puré de zanahoria y un pescadito  asado, la proteína es genial. Recuerda que no vas a tocar la sal, ¿¡qué vas  a usar !? Exactamente, hierbas aromáticas,
que harán más sabrosa tu comida sin recurrir  al sodio, que es malo para tu presión arterial. Y esta dieta no solo se basa en  eliminar la sal de tu alimentación, sino que se basa en la introducción  de alimentos naturales y frescos, frutas y verduras ricas en  potasio, calcio y magnesio. El potasio en estos alimentos hará que el  sodio de tu cuerpo sea capturado y eliminado, por lo que aumentará tus ganas de orinar,  disminuyendo la presión de tu cuerpo. Y, por ejemplo, el magnesio es un potente  relajante muscular natural que hará que tus arterias tengan más capacidad  para relajarse y regular la presión. En la cena por ejemplo, la cena es super elegante,  ¡¿con qué vas a empezar ?! Una crema de calabaza.
Crema de calabaza con unas semillas para  decorar, es elegante y super rica en magnesio, que es lo que hemos aprendido que  relaja las arterias y facilita el paso de la sangre por allí, ¿me expliqué?  Y es bueno que tu presión arterial no suba. Y lo puedes acompañar con un pollo a la  plancha. Puedes hacer – que me encanta-, arroz integral con tomate. ¿Y con qué lo puedes acompañar?  Con un jugo de tomate. El jugo de tomate puedes beberlo en  el almuerzo, a media tarde. El jugo de tomate tiene mucho potasio y luego ¿qué  le agregas? Una cucharada de levadura de cerveza. La levadura de cerveza es un suplemento rico en  potasio que puede ser utilizado en el día a día, en la sopa o en los jugos, por ejemplo,  para ayudar a controlar la presión arterial. Además de la dieta DASH, que es una dieta  específica para bajar la presión arterial, también debes asociar un té con  elevado potencial diurético para ayudar a mantener la presión arterial en su  lugar, un buen ejemplo es el té de hibisco.
Me encanta el té de hibisco. Huele bien,  sabe bien, es rico en antioxidantes, es diurético y te ayudará a  complementar la dieta sin duda alguna. Este té tienes que beberlo dos o tres veces al  día. En la mañana, en la tarde y en la noche, ¿ok? Y para preparar el té es sencillo, son 2 cucharadas de flor de  hibisco en 300 ml de agua caliente.
Cubre la taza, espera entre 5 a 10  minutos, hasta que el agua esté colorida, hermosa y olorosa, y luego te tomas una  taza calentita en la mañana, tarde y noche. Ojo que cuando empieces a comer de forma  más saludable para reducir la presión, cuando empieces a tomar un poco  de té para reducir la presión, es importante hablar con tu médico para que  realice los ajustes necesarios en tu medicación. Porque puede que sea necesario disminuir la dosis,  ¡incluso dejar de tomarlo!, si haces todo bien… Es así, si estás realizando  estos pequeños cambios, puede que no necesites tomar más  el remedio, ¿viste que bueno?
Porque la medicina es buena cuando se  necesita, si no la necesitas, ¡mejor todavía! Tengo una historia muy interesante sobre esto  de hipertensión arterial… Vino una paciente referida del cardiólogo, desesperada, diciéndome: «Cuando el cardiólogo me dijo que tenía  que bajar de peso porque tenía la presión arterial alta, comencé a hacer dieta».  Yo le dije: ¡Muy bien! y ¿qué hiciste? En su cabeza, ¿qué fue lo que hizo?  «Solo como ensalada y una proteína, un bistec, un pollo y una ensalada». Yo le dije¡ok! y ella me dijo: «¡Perdí  mucho peso!» y dije «Eso es genial, pero entonces… ¿Cuál es el problema?»Y ella dijo: “Pero mi presión  arterial no quiere ceder, mi presión arterial no baja. Tengo  un problema, ¡algo está mal! » ¡¿Y qué descubrimos juntas?! Que se comía su pollo y le colocaba un poco de  sal, lo preparaba a la plancha. Pero para poder comerse la ensalada,  utilizaba toda la salsa que podía.
Entonces, le colocaba salsa a la  lechuga, comía tomates con sal … Para comer la ensalada que tenía menos calorías,  es cierto, añadió sal, que no tiene calorías. Porque ella pensó: “Como solo quiero perder peso, puedo hacer esto…” Y su  presión arterial no bajaba. Para que veas que es cierto que la  obesidad está relacionada con la hipertensión arterial, pero los hábitos  alimentarios, en este caso específico, la sal no dejaba que su presión bajara,  a pesar de que había perdido peso. Y esta historia de la sal no es nueva. No hay ninguna novedad en que la  sal eleva la presión arterial. El comportamiento del agua  y la sal es así, agua y sal,
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la sal es un imán para el agua.  Entonces, donde hay sal hay agua. Y si el agua está dentro de tu arteria,  junto con la sal en tu arteria, la presión en el interior aumenta y tu arteria  tiene que aguantar, y si no lo hace… estalla. Y allí es cuando ocurren los accidentes  que conocemos cuando aumenta la presión.
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Lo que pasa es que tienes que reducir la sal  en tu comida; tienes que reducir la cantidad de comida que preparas con mucha sal, como  cosas listas para comer, sopas empaquetadas a las que solo le tengas que poner agua  y está lista para comerla… ¡Un peligro! Y cualquier cosa que tenga mucho sodio.  Los refrescos también son un peligro,
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por ejemplo, y es dulce, pero  tiene sodio, ¿me explico? Y cualquier tipo de sal. «Ay  Tati, pero yo solo uso la sal rosa del Himalaya». No importa el  color de la sal que usas, es sal. Y si tienes un problema de hipertensión, reduce  la cantidad de sal que utilizas en las comidas. Pero puedes sustituir la  sal por hierbas aromáticas,
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para que tus comidas sean más sabrosas. No tiene por qué ser malo quitar la  sal, es cuestión de educar tu paladar, este se irá acostumbrando a ingerir menos  sal y a sentir más el sabor de la comida. Y puedes usar pimienta y puedes  usar más hierbas aromáticas, puedes usar albahaca, orégano,  romero, en fin… ¡inventa!
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Hay tantas hierbas aromáticas que potencian el sabor de las comidas sin  tener que recurrir a la sal. Y créeme, todo es cuestión de costumbre.  Y es un hecho que disminuir la cantidad de sal de tu alimentación reduce tu presión arterial. Y para controlar la presión  arterial no hay excepciones, no hay día en el que puedas  comer toda la sal que quieras. Porque solo esa vez es suficiente para  que te produzca un ACV. Y hasta aquí fue. Y si la sal es terrible para la presión arterial, el azúcar es aún peor porque no solo engorda,  sino que también aumenta el ácido úrico, aumenta los triglicéridos, aumenta la grasa  abdominal, puede causar síndrome metabólico, ocasionando que se eleve la presión arterial. Además, el hecho de que inflame tu cuerpo, reduce la elasticidad de las arterias,  aumentando el riesgo de que estalle. Porque no resiste la alta presión dentro de ella, ¿me expliqué? Entonces, si la sal es  mala, el exceso de azúcar también lo es. Es tan malo como el alcohol o  los cigarrillos, por ejemplo, que también tienes que eliminarlos  de tu vida si eres hipertenso. ¡Ah, me olvidé de un asunto importante! La cafeína no es bienvenida para  controlar la presión arterial. Mmm… Entonces, si necesitas café, debes  tomarlo bien temprano. Si tu presión arterial no está bajo control  estos días, ¡olvídate del café! Entonces, si tienes la presión alta, ¡no lo dudes! ¡Todas las semanas, al menos  una vez, debes medirla! Si nunca has tenido presión alta, verifícala  por lo menos una vez al año, no cuesta nada. Y si tienes algún síntoma que crees que podría  ser presión alta, como dolor en la nuca, un malestar tipo mareos, que podrían estar  relacionados con la presión arterial alta, ve a verificar, no cuesta nada medirla. ¡Ahora sabes qué hacer para mantener  tu presión arterial bajo control y deshacerte de cualquier cosa que pueda causarte  problemas cardiovasculares, renales o lo que sea! Y ya sabes, está en tus manos mejorar  tu alimentación, tomarte aquel tecito interesante y hablar con tu médico para  que ajuste la medicación. Y tal vez,eliminar los medicamentos de tu vida. Y está en tus manos también, darle me  gusta a este video y suscribirte a este canal que solo tiene cosas interesantes  para que aprendas cómo mejorar tu salud. ¡Hasta la próxima! Imagina que esto es una arteria y tal, ¡oh!