El blog del Dr. Enrique Rubio

Categoría: psiconeuroinmunologia (Página 3 de 3)

Evolutionary legacy of an inflammatory bias

| . Early evolutionary pressures derived from human interactions with pathogens, predators and human conspecifics (such as rivals) resulted in an inflammatory bias that included an integrated suite of immunological and behavioural responses that conserved energy for fighting infection and healing wounds, while maintaining vigilance against attack. This inflammatory bias is believed to have been held in check during much of human evolution by exposure to minimally pathogenic, tolerogenic organisms in traditional (that is, rural) environments that engendered immunological responses characterized by the induction of regulatory T (TReg) cells, regulatory B (BReg) cells and immunoregulatory M2 macrophages as well as the production of the anti-inflammatory cytokines interleukin-10 (IL-10) and transforming growth factor-β (TGFβ). In modern times, sanitized urban environments of more developed societies are rife with psychological challenges but generally lacking in the types of infectious challenges that were primary sources of morbidity and mortality across most of human evolution. In the absence of traditional immunological checks and balances, the psychological challenges of the modern world instigate ancestral immunological and behavioural repertoires that represent a decided liability, such as high rates of various inflammation-related disorders including depression

EVOLUCIÓN, INFLAMACIÓN Y DEPRESIÓN

La discordancia entre las vías inflamatorias y circuitos neuronales en el cerebro, conducen a alteraciones del comportamiento, tales como no atender a la alarma. Es probable que los primeros seres humanos al conectarse con los agentes patógenos y depredadores modificaran las respuestas biologicas. Sin embargo, en los tiempos modernos, tales interacciones entre la inflamación y el cerebro parecen impulsar el desarrollo de la depresión y pueden contribuir a la falta de respuesta a los tratamientos antidepresivos actuales. Los datos recientes han demostrado los mecanismos por los cuales la inmunidad innata y adaptativa interactúan con los neurotransmisores y los circuitos neuronales para influir en el riesgo de depresión.
La depresión afecta a hasta el 10% de la población adulta en los Estados Unidos y representa una de las principales causas de discapacidad en todo el mundo. Aunque existen tratamientos eficaces, aproximadamente un tercio de todos los pacientes con depresión no responden a la terapia convencional con antidepresivos
Son necesarios nuevos conceptos que aclaren el desarrollo de la depresión y proporcionen soluciones eficaces para su tratamiento.
Intentamos demostrar que el sistema inmune – y, en particular la respuesta inflamatoria – son factores que contribuyen de forma importante en la fisiopatología de la depresión.

Las respuestas inmunitarias del huésped tanto a patógenos, como depredadores y factores sociales desde nuestros ancestros hasta nuestros días han sido responsables de estas respuestas.

Los seres humanos y animales de laboratorio proporcionan evidencia convincente de que el estrés neuro-relevante y la inmunidad forman un sistema integrado que evolucionó
para proteger a los organismos de una amplia gama de amenazas ambientales.

La respuesta clásica «lucha o huida» se caracteriza por aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial, así como en cortisol y catecolaminas, conocidas como estrés activan las vías inflamatorias periféricas que son claves para movilizar en células mononucleares de la sangre, incluyendo la activación del factor de transcripción factor kappa B nuclear (NF-kB), y conlleva un aumento acusado de los niveles circulantes de pro-inflamatorias citoquinas, tales como interleucina-6 (IL-6).
El organismo no responde a un germen, sino a una serie de circunstancias potencialmente peligrosas para él.
En estudios experimentales, se ve que las personas que han tenido estrés en los primeros años de su vida, presentan más riesgo de presentar depresiones que son más intensas cuando el factor desencadenante es más intenso.

¿Por qué un estímulo patógeno cualquiera inducen una respuesta inflamatoria, y ¿por qué esta respuesta promueve la depresión?
Recientemente se demuestra repetidamente que las interacciones entre inflamación y cerebro conducen a la depresión y posiblemente también a la falta de respuesta a las terapias antidepresivas.
El síndrome de adaptación a la enfermedad descrito Seyle, incluye desarreglos sociales, disminución apetito, letargo, deterioro de la concentración, humor deprimido, irritabilidad, dolores musculares y fiebre. Este síndrome se cree que prioriza el desplazamiento de la energía a la lucha contra la infección y la curación de heridas. Minanhedonia
La falta de interés por actividades placenteras, representa una disminución de la
motivación, puede representar una disminución de la respuesta a la recompensa, o en
disposición de ahorrar esfuerzos para obtener la recompensa.
Esta defensa del huésped mediante la depresión intenta explicar si la inmunidad es
vista como simplemente otro sistema fisiológico dentro del cuerpo. Sin embargo, cuando se ve que es producto de la evolución de millones de años tanto en el mundo de los microorganismos y parásitos, como los humanos.
La respuesta inflamatoria que se obtiene con animales de laboratorio, es expresivo de todas las manifestaciones que presenta lo biológico, y también da una idea de una paradoja profunda.
La mayoría de las teorías de adaptación de la depresión se han centrado sobre los beneficios potenciales de los síntomas depresivos para las relaciones con otros humanos.
Los modelos recientes han cambiado el enfoque de las relaciones con la gente, y son perjudiciales o beneficiosa ante los agentes patógenos
Estas teorías, están apoyada por pruebas convincentes que postulan como los humanos modernos han heredado un sesgo de la genómica con la inflamación, debidos a esta respuesta el síntoma depresivo promueve la supervivencia y la reproducción en un entorno altamente patógeno y agresivo en el cual los humanos nos desenvolvemos.
La vulnerabilidad humana a la depresión, evolucionan hacia una conducta a veces llamada o «comportamiento enfermizo» – que promueve la supervivencia cara a la infección. De hecho, se ha planteado la hipótesis de que la evitación social y anhedonia característica de la depresión sirven para desviar los recursos energéticos a la lucha contra la infección y la cicatrización de heridas, mientras que la característica de la ansiedad hipervigilancia trastornos, comúnmente comórbido con la depresión, nos protegen contra los ataques de patógenos. Incluso el estrés psicológico puede entenderse, como los factores de estrés que afectan a la los mamíferos más evolucionados. En un primer tiempo se referían exclusivamente a los riesgos que ofrecía la caza y la productividad. Los desafíos se limitaban a los patógenos y a la muerte celular por infección. Era la herida y su reparación los motivos de preocupación. Cuando posteriormente aparecieron múltiples agentes agresivos, aunque persistió el estrés de sufrir heridas, hubo que desarrollar mecanismos inflamatorios para contrarrestarlos.
Se cree que la inflamación que se ha mantenido bajo control durante gran parte de la evolución humana por la exposición a organismos patógenos, mínimamente invasivos en el tradicional medio rural, engendraron respuestas inmunológicas que se caracterizan por la inducción de células T reguladoras (Treg), células B BREG inmunorreguladores M2 macrófagos, así como la producción de los anticuerpos anti-inflamatorio, citoquinas, factores de crecimiento, interleucina-10 (IL-10) y la transformación del factor-β (TGF).

En los tiempos modernos, pese a la desinfección de los entornos urbanos de las sociedades más desarrolladas en que han sido vencidas gran parte de las infecciones responsable de grandes mortandades, se acompaño al mismo tiempo de multiples problemas que desafiaban nuestra psique .
En la actualidad una vez dominado parcialmente los problemas infecciosos, aparecieron de una manera imperiosa los problemas psicológicos tan frecuentes en el mundo moderno. que nos inducen a la producción de agentes inmunológicos diferentes y al desarrollo de una inflamación más contundente, y la depresión puede ser una lógica consecuencia de esto.
El aumento de los síntomas depresivos en las mujeres a través del tiempo, puede haber sido al mismo tiempo beneficioso en la en edad de procrear, ya que al aumentar la inflamación que controlaban mejor los procesos infecciosos, también aumentaban el número de depresiónes.
El marcado aumento nuestros tiempos de la inflamación, ha aumentado la prevalencia de enfermedades autoinmunes, alérgicas e inflamatorias enfermedades ha aumentado notablemente en los últimos 100 años, y continúan haciéndolo.
La evidencia creciente sugiere que este patrón de extensión y desregulación inmune puede resultar de interrupciones en nuestra relación y / o contacto con una variedad
de microorganismos inmunorreguladores no letales y parásitos, especialmente los comensales y simbiontes en la microbiotas del intestino, piel y fosas nasales y cavidades orales. Estos organismos (a menudo referido como ‘Viejos amigos’) comparten una tendencia a reducir la inflamación y suprimir las células inmunes efectoras a través de la inducción de IL-10 y factor de crecimiento transformante-β (TGF) así como fomentar el desarrollo anti-inflamatorio
de esas poblaciones de células inmunes. Los humanos modernos ahora carecen de capacidad Inmunorreguladora suficiente, especialmente durante la infancia y la niñez.

La inflamación y la depresión
Los pacientes con depresion severa, tienen aumentada la respuesta inflamatoria sobre todo proinflamatorias y sobreexpresan, citosinas y sus receptores y aumento de los niveles de reactantes de fase aguda, quimosinas y las moléculas de adhesión solubles en la sangre periférica y líquido cefalorraquídeo (LCR) . Además, aumentan la expresión de una variedad de genes de inmunidad innata y sus proteínas, IL-1β, IL-6, TNF, receptor 3 Toll-like
(TLR3) y TLR4, encontradás en estudios post mortem de cerebros de las víctimas de suicidio que tenían depresión.
Los metaanálisis de la literatura concluyen que en sangre periférica, la IL-1β, IL-6, la proteína TNF y C-reactiva (CRP) son los biomarcadores más fiables de inflamación en pacientes con depresión. Los polimorfismos en genes de citoquinas inflamatorias, incluyendo los que codifican L-1β, TNF y la PCR, también se han asociado con depresión y su respuesta a tratamiento. Además se han encontrado otros genes implicados en la depresión que derivan de meta-análisis en todo el genoma
Es evidente también que los marcadores inflamatorios están elevados no
sólo en un subgrupo de pacientes con depresión sino también en pacientes con otros trastornos neuropsiquiátricos incluyendo trastornos de ansiedad y esquizofrenia.

¿Porque mecanismo el estrés se convierte en inflamación?
Después de prestar gran atención a las vías neuroendocrinas y su comportamiento en el estrés lo que incluye el eje hipotálamo-adrenal (HPA) y el sistema nervioso simpático (SNS), los cuales tienen función moderadora el inmunidad, recientemente se ha utilizado el término inflamosomas, como representante de la interface entre estrés e inflamación. Los Inflamosomas son complejos de proteínas que se forman en las células mieloides en respuesta a microorganismos patógenos y no patógenos o, a factores de estrés «estériles».

La dopamina tiene un papel fundamental en la motivación y la actividad motora, y las citoquinas han demostrado disminuir la liberación de dopamina en los ganglios basales en asociación con disminución de la motivación del esfuerzo así como reduce la activación del circuito de recompensa en los ganglios basales, en particular el estriado ventral. Estímulos inflamatorios en el cuerpo estriado se han asociado con reducciones en la respuesta a la recompensa mediante plataformas de neuroimagen, lo que demuestra la validez y la reproducibilidad de estos mediadores por citoquinas

Dado el impacto que las citoquinas tiene en los sistemas de neurotransmisores que regulan la actividad funcional de los neurocircuitos en todo el cerebro, no es de extrañar que estudiós con neuroimagen, revelen alteraciones inducidas por citoquinas en la actividad cerebral regional. En consonancia con la ventajas evolutivas de la asociación entre el cerebro y el sistema inmune, citoquinas primaria objetivos en el SNC implican esas regiones del cerebro que regulan la motivación y la actividad motora (promoción del desarrollo social la evitación y la conservación de la energía), así como la excitación, la ansiedad y alarma (hipervigilancia promoción y protección contra el ataque) .
Este trabajo reducido de la publicación mas abajo reseñada, aunque algo ilusorio daría un camino para unir lo psíquico con lo físico.

The role of inflammation in depression: from evolutionary imperative to modern treatment target Andrew H. Miller and Charles L. Raison

1Emory University School of Medicine, Winship Cancer Institute, Atlanta, 30322 Georgia, USA.
2School of Human Ecology, University of Wisconsin– Madison, Madison, 53706 Wisconsin, USA.
Correspondence to A.H.M. amill02@emory.edu doi:10.1038/nri.2015.5 . Published online 29 Dec 2015

INMUNIDAD INFLAMACIÓN Y SISTEMA NERVIOSO.

El cerebro es una máquina predictiva encaminada a disminuir la incertidumbre del ambiente.
La evolución de esta víscera ha ocurrido a lo largo de miles de años hasta conducirnos al cerebro del homo sapiens que se distingue de los demás homínidos por pesar casi 1500 gramos y tener un mayor abultamiento frontal y de las eminencias parietales y cierta disposición de neuronas.
El cerebro está encargado de funciones superiores como memoria, entendimiento y voluntad. Pero también está encargado de la regulación de nuestro cuerpo para mantener el metabolismo que a su vez mantienen el funcionamiento de las funciones superiores.
El cerebro se comunica con el resto de nuestra economía por dos sistemas
Sistema somático voluntario. Desde los pares craneales y las raíces raquídeas a través de los nervios periféricos se comunica con todo el organismo y recibe y emite órdenes. Para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Este sistema es voluntario y nos permite el movimiento y desplazamiento.
Junto a este existe el sistema vegetativo que consiste en una serie de ganglios nerviosos que también reciben y emiten impulsos al sistema nerviosos central y desde este al resto de nuestra economía y consta de dos ramas principales.
1.- Parasimpático que está formado por los últimos pares craneales, espinales, glosofaríngeos y vagos y posteriormente se le suma unas colecciones de ganglios y vías lumbares. Este sistema tiene la misión de hacer reposar nuestro organismo y permitir que se recupere del cansancio.
2.- Simpatico que está compuesto también por una serie de ganglios pararaquídeos bilaterales que van desde la médula cervical baja hasta la lumbar y que tiene por misión prepararnos para la acción.
Ambos sistemas vegetativos no son totalmente opuestos y si colaboran en el mantenimiento de funciones vitales, la homeostasis o equilibrio de nuestras funciones
Inmunidad.
Podríamos definirla como un sistema de defensa del organismo y la inflamación es la forma como lo hace. Y a su vez decir que la mente controla nuestro sistema inmunológico y lo hace a través del sistema nervioso vegetativo.
El concepto de agresión, traumatismo y estrés, se confunden, de forma que el estrés está reconocido como la respuesta a los traumatismos psíquicos, aunque también se entiende por la agresión a nuestra biología de un traumatismo. Nos vamos a referir a tres tipos de circunstancias que nos hacen enfermar simplemente como AGRESIONES Y ESTAS PUEDEN SER: FISICAS, BILOGICAS Y PSIQUICAS.
Empezaremos a contar algo que fue trascendental para el conocimiento del equilibrio del sistema nerviosos periférico, pero también central. El experimento de Paulov ayudó marcadamente a conocer este misterio. A los perros de su experimento les colocaba una cánula en el estómago que recogía el jugo gástrico que segregaban cuando les enseñaba un trozo de carne o se las hacia probar. Una vez demostrado esto les añadió un nuevo estimulo proporcionado por el ruido de un metrónomo y comprobó que seguían los perros segregando jugó gástrico. Observó que con el ruido de un metrónomo y mostrarle carne, los animales continuaban segregando jugos gástrico. Pero cuando no les mostraba carne y con solo el sonido del metrónomo, continuaban segregando jugos. Debió ser para él una gran sorpresa y seguramente no lo interpretó de la manera real.
En el año 1974 Robert Ader hizo un experimento similar con ratas, a las que suministraba un líquido azucarado que les gustaba mucho, al mismo tiempo que les inyectaba un producto que le provocaba una desagradable sensación, con la intención de ver sí las ratas rechazaban la ingesta de líquido azucarado. Las ratas empezaron a morir lo cual llamó profundamente la atención del investigador e inmediatamente empezó a buscar ayuda y lo tuvo con Nicholas Cohen, inmunólogo que descubrió que la inmunidad de los animales muertos estaba claramente disminuida y ello provocaba el fueran agredidas por gérmenes que le producían la muerte. Ader y Cohen, publicaron un artículo impactante “Behaviorally Conditioned imunosuppresion”
Durante muchos años el tema provocó controversias muy fuertes. Era difícil de entender la asociación de los dos estímulos y la producción de una indefensión inmune. Recordaba la aseveración de Luis Vives el famoso filósofo valenciano, “cuando dos cosas se aprenden simultáneamente, el evocar una provoca la aparición de la otra”. Había dos estímulos que desencadenaban la misma respuesta.
Una serie de trabajos buscando como se modificaba la inmunidad por la agresión mostraron que los deportistas de élite que practicaban ejercicios peligrosos, como puenting, motocross, paracaidismo etc. Sufrían también una inmunodepresión aunque posteriormente la compensaban.
Pero un trabajo definitivo fue el estudio en la nave Skylab, fue la primera nave espacial estadounidense. Fue diseñada por Raymond Loewy. Orbitó alrededor de la Tierra desde 1973 a 1979 y fue visitada por astronautas en tres ocasiones durante sus dos primeros años de servicio. Una publicación posterior mostró lo que sigue:
Skylab experiment results: hematology studies. Kimzey SL1, Ritzmann SE, Mengel CE, Fischer CL.
Estos estudios fueron diseñados para evaluar aspectos específicos de los sistemas inmunológicos y hematológicos del hombre
No hubo cambios significativos, ya sean inmediatos o diferidos de glóbulos rojos.
Sin embargo, la capacidad de los linfocitos para responder a un desafío mitogénico in vitro fue reprimida después del vuelo, y parecía estar relacionada con la duración de la misión.
Sólo se observaron pequeñas diferencias en los patrones de proteínas plasmáticas.
En la segunda misión hubo cambios en las proteínas implicadas en el proceso de coagulación, que sugiere una condición hipercoagulacion.
Los trabajos se sucedieron siempre polarizados a agresión psíquica e inmunidad y de especial interés fue en 1998 el trabajo de Jonny and Glaisser, que estudiaron parejas humanas conflictivas a las que sometían a situaciones que les proporcionaba motivos de peleas y discusiones durante algún tiempo y vieron que había también una clara disminución de la inmunidad sobre todo en mujeres.
También fue importante el estudio de las personas que cuidaban enfermos crónicos con enfermedad de Alzheimer y que estaban por tanto sometidos a un estrés crónico y se vio que cuando se le producían pequeñas heridas a ellos y a un grupo control sin estrés, las heridas de los cuidadores tardaban un 24% más de tiempo en curar que al grupo testigo que no estaba sometido a estrés.
En 1988 Angelika Buske-Kirsechbraun de la universidad Alemana de Trier, hizo un experimento en el que inyectaba adrenalina a voluntarios al mismo tiempo que les daba un caramelo de fuerte sabor y efervescente y comprobó, que la adrenalina incrementa las defensas sin demasiados efectos colaterales. Y posteriormente sustituyó la adrenalina por suero fisiológico continuando con el caramelo, y comprobó que cuando se le inyectó suero fisiológico en vez de adrenalina también se elevaban las células inmunológicas en sangre.
Los experimentos se sucedieron y quizás el más significativo fue el estudio de personas que habían sufrido el terremoto de San Francisco y en 1988 se evaluaron hace 68 personas estudiándose su respuesta inmunitaria en un periodo de tiempo transcurrido desde el terremoto que iba desde los once días a los cuatro meses del terremoto. Y encontraron:
1. Personas que habían tenido un bajo distres y escaso trastorno para la vida, tenían una respuesta inmunitaria alta.
2. Los grupos con alto distres y bajo trastorno para la vida tenían una clara disminución de la respuesta inmunitaria.
3. En el grupo con bajo distres y alto trastorno para la vida tenían también disminuida la inmunidad y en el último grupo, harto distres y alto trastorno para la vida tenían aumentado la inmunidad.
4. Las personas con alto distres y graves daños, tenían una inmunidad alta
Un experimento importante lo hizo el Dr. Blalock de la universidad de Alabama, encontró en los cultivos de linfocitos, que cuando se les infectada el cultivo con gérmenes, producían anticuerpos y estos no ocurría o lo hacían en menor cantidad cuando se ponía en el cultivo ACTH. La inmunidad también disminuía por el efecto químico.
Otro gran hallago lo obtienen Suzanne Felten de la Universidad de Rochester estudiando al microscopio los trayectos vasculares, vio que las terminaciones nerviosas no sólo alcanzaban las fibras musculares lisas sino también a los linfocitos. El sistema nervioso regula directamente la inmunidad poniéndose en contacto y estimulando los linfocitos
En el control y manejo del proceso inflamatorio intervienen varios sistema del organismo, neural, endocrino, inmune y psicológico.
En el organismo, una agresión exógena (agentes biológicos, agentes físicos, agentes químicos o traumatismos) o endógena (radicales libres, determinados metabolitos celulares, alteraciones inmunitarias, neurotransmisores u hormonas) es interpretada por el sistema inmune como una señal de alerta. Los receptores de membrana de los macrófagos y los mastocitos reaccionan al estímulo liberando una serie de mediadores de la inflamación ya sean de origen lipídico derivados del ácido araquidónico (postaglandinas, leucotrienos, tromboxanos), aminoácidos modificados (histamina, serotonina) o pequeñas proteínas (citoquinas proinflamatorios) que desencadenan una serie de reacciones con la intención de neutralizar la agresión.
Ante el agente patógeno, a nivel intracelular se activa el factor de transcripción nuclear NF-kB que induce la expresión de determinados genes que codifican para proteínas proinflamatorias como las citoquinas (IL-1,IL-4, IL-6,IL-8) interferones (IFN-γ), factores de necrosis tumoral (TNF-α) etc). Paralelamente, en la membrana celular la enzima fosfolipasa A2 descompone los fosfolípidos de membrana en glicerol y ácido araquidónico, que será el sustrato que utilizará la enzima ciclooxigenasa (COX) para producir prostaglandinas (como la PGE2) en el caso de los macrófagos y PGD2 en el caso de los mastocitos) y tromboxanos (TXA2 en plaquetas), o el sustrato de la enzima lipooxigenadsa (LOX) para producir leucotrienos y lipoxinas. En la inflamación aguda, una vez controlada la agresión, los macrófagos y leucocitos proceden a la reparación tisular liberando nuevos mediadores, esta vez citoquinas antiinflamatorias (IL-10, factores de crecimiento, TGFB y otros) para restaurar la homeostasis. REGULACIÓN DE LA INFLAMACIÓN: En el control y regulación del proceso inflamatoria intervienen de forma activa diferentes sistemas. A nivel endocrino a través del eje hipotálamo-hipófisis-suprarrenal las hormona córticotropa (CRH) actúa como hormona proinflamatoria estimulando los mastocitos y macrófagos (de la epidermis produciendo enfermedades de la piel, por ejemplo) y desencadenando la respuesta inflamatoria. A su vez la histamina, IL-1 e IL-6 secretadas en la reacción inflamatoria ejercen una acción de control por feed-back sobre la glándula endocrina hipotálamo, regulando según necesidad la secreción de CRH. En el mismo eje las glándulas suprarrenales ejercen un control inhibidor de la inflamación secretando glucocorticoides (cortisol), con efecto antiinflamatorio, esta regulación también dependiente de un mecanismo de retroalimentación negativa que ejercen las propias sustancias proinflamatorias sobre la glándula endocrina suprarrenal. A nivel neural, el sistema autónomo parasimpático también ejerce una función de regulación de la inflamación, el nervio vago,envia su principal neurotransmisor (acetilcolina) cuyo efecto antiinflamatorio atenua la producción de TNF, IL-1B, IL-6 e IL-8 por parte de los macrófagos, este efecto estaría producido porque el nervio vago posee terminaciones aferentes que harían un chequeo de la inflamación periférica y enviarían esta información al sistema nervioso central. Este a través del nervio vago y sus terminaciones eferentes liberaría acetilcolina produciendo un potente efecto antiinflamatorio. Determinados experimentos establecen que la acetilcolina atenúa la producción de citoquinas proinflamatorias (TNF, IL-1B, IL-6 e IL-8) pero que no tiene ningún efecto inhibidor sobre la producción de citoquinas antiinflamatorias (IL-10), lo que explicaría, en parte, el efecto beneficioso de ejercicios de relajación, que estimulan el sistema nervioso parasimpático y la secreción de acetilcolina, sobre desordenes inflamatorios en la piel. El estrés psicológico tendría en los sistemas endocrino y neural, un efecto relevante aumentando la secreción de CRH y menguando la secreción de acetilcolina. La regulación neuronal es mucho más específica y local que la regulación endocrina o humoral. A nivel inmunológico macrófagos, mastocitos y neutrófilos polimorfonucleados ejercen un control total en la respuesta inflamatoria ya que son sus receptores, a los que se une la noxa, y sus secreciones, las que ponen en marcha la cascada fisiológica que define la inflamación. Los macrófagos son sensores de la señal inflamatoria interaccionando con el sistema inmune, sistema nervioso y sistema endocrino en el intento del organismo por regular la respuesta inflamatoria. Ejercerán esta función mediante la producción de citosinas que tendrán un efecto sobre las inervaciones nerviosas tisulares. En la inflamación crónica los mediadores proinflamatorios continúan actuando más allá de la eliminación del daño inicial.
Garry Egger , PhD, MPH, Health and Human Sciences, Southern Cross University, Lismore, NSW, Australia, and Centre for Health Promotion and Research, Sydney, NSW, Australia
Afirma que la teoría de los gérmenes durante el siglo XIX era responsables de múltiples y terribles enfermedades que producían pandemias y gran mortalidad. La gripe, la tifoidea, la peste y otras varias se seguían de rápida e intensa mortalidad que afectaba a millones de personas.
A partir de entonces y por distintas causas, aumento de la economía, al mejor estilo de vida, higiene y a las vacunas, aparecen un número importante de enfermedades crónicas que no son transmisibles y cuyo origen es posiblemente plural y que constituye lo que se llaman enfermedades crónicas o «metaflammation” que están producidas por “antropogens”,
Son el resultado de un tipo de vida nuevo, de la alimentación, de la higiene y cuya base subyacente podían ser gérmenes de comportamiento inusual
El neurocirujano Kevin tracey , inmunólogo del Instituto Feinstein de Investigación Médica en Manhasset, Nueva York nos ha sorprendido con nuevas perspectivas, La inflamación, que es parte del sistema inmunitario, ayuda a que el cuerpo sane después de una lesión, pero puede dañar órganos y vasos sanguíneos si dura más de lo necesario.
Una de las funciones del nervio vago es reajustar el sistema inmunitario e interrumpir la producción de sustancias inflamatporias. El nervio vago es una especie de mensajero bidireccional que pasa señales electromagnéticas entre los órganos y el cerebro
Tracey y sus colegas, descubrieron la «pieza que faltaba» para saber cómo el nervio vago orquesta la inmunidad. Los linfocito T del bazo del ratón estaban en realidad liberando acetilcolina por sí mismos después de recibir la señal del nervio vago, jugando un papel fundamental en el bloqueo de la inflamación.
Aunque los linfocitos T son parte del sistema inmunológico, en este contexto, están básicamente funcionando como neuronas, señaló Tracey. “Las células inmunes juegan un papel protector anti-inflamatorio frente a la enfermedad.
A partir de entonces una nueva perspectiva terapéutica se abre para reparar el desequilibrio del sistema vegetativo. Así como el sistema simpático a través de la adrenalina estimula la inmunidad, el sistema parasimpático la inhibe mediante la acetilcolina frenando la temida reacción inflamatoria causante las enfermedades crónicas.
Aparecen entonces una serie de cirugías con un marcado éxito sobre enfermedades dispares y así concretamente sobre la epilepsia resistente a otros procedimientos conservadores y estimulando el nervio vago en el cuello se obtienen resultados prometedores (EPILEPSIA Neurología julio 1998 vol. 51 no. 1 48-55). La estimulación del nervio vago izquierdo, de forma intermitente y crónica, ha demostrado eficacia en modelos animales y en ensayos clínicos preliminares para suprimir la aparición de convulsiones. Los pacientes tratados sufrían por lo menos 6 convulsiones al mes. Crisis parciales y secundariamente generalizadas. A los pacientes se le implanto quirúrgicamente un estimulador en el nervio Vago izquierdo, un generador de marcapasos programables subcutánea infraclavicular.
Los pacientes que recibieron estimulación de alta frecuencia (94 pacientes, de edades entre 13 a 54 años) tuvieron una reducción promedio de 28% en la frecuencia total de las crisis en comparación con una reducción del 15% en el grupo de baja estimulación (102 pacientes, de 15 a 60 años; p = 0,04 ).
También en pacientes con insuficiencias cardíacas por disminución de la contractilidad sin lecciones isquémica, se ha conseguido una importante recuperación del ritmo y contractibilidad cardiaca utilizando también la estimulación del nervio vago (EPILEPSIA Neurología julio 1998 vol. 51 no. 1 48-55 ).
Pero lo más representativo de la estimulación del vago ha ocurrido en la artritis reumatoide enfermedad autoinmune enormemente lesiva y resistente a la medicación. Quizás el número de casos tratados no sea grande pero si espectacular, pues en algún caso publicado la remisión del fenómeno inflamatorio y su impotencia funcional en las manos regresaron totalmente. De igual forma el TNF causante del dolor en esta enfermedad ha disminuido marcadamente en los distintos controles.
También en las grandes y persistente cefaleas la estimulación del vago mediante un emisor de frecuencias eléctricas aplicadas al cuello ha conseguido resultados alentadores en estas cefaleas resistentes a todo.
Estamos pues ante un fenómeno inesperado. El sistema nervioso regula directamente la inmunidad y además frena el temido fenómeno de la inflamación crónica. La terapéutica quirúrgica parece muy agresiva para la multitud de procesos y enfermedades crónicas que se beneficiarían de la estimulación del vago. Tenemos que dar un paso atrás y pensar que todas las terapias orientales en la que devolvían la salud mediante la meditación y ejercicios de búsqueda interior tiene algo aprovechable.
De igual manera que los estímulos externos nos hacen enfermar y rompen nuestra homeostasis, también es posible que reguladores internos de una manera más consciente que la utilizada hasta ahora, sean capaces de devolver el equilibrio homeostatico.
Hay múltiples publicaciones no demasiado ortodoxas, que quieren demostrar estas prácticas son beneficiosas para cantidad de enfermedades.
No parece dudoso que el entusiasmo que está despertando la psiconeuroinmunología dará resultados y no lejanos.
Nuestra mente nos hace buscar apasionadamente como descubrir el camino en el inconsciente para de manera razonada regular la inflamación restaurando la homeostasis.

Bibliografia
– R Ader, N Cohen. Behaviorally conditioned immunosuppression.
– Psychosomatic Medicine, 1975 – journals.
– Garry Egger , PhD, MPH, Health and Human Sciences, Southern Cross University, Lismore
-Blalock, JE. 2002. Harnessing a neural-immune circuit to control inflammation and shock. J. Exp. Med. 195:F25-F28.
– Buske-Kirschbaum University of Trier, Germany.Brain-Immune Interactions in Stress-the impact of hormones on disease.Brain-Immune Network Group
Bristol, UK, November 30th 2002
-EPILEPSIA Neurología julio 1998 vol. 51 no. 1 48-55
-Kevin tracey , inmunólogo del Instituto Feinstein de Investigación Médica en Manhasset,
– Kimzey SL1, Ritzmann SE, Mengel CE, Fischer CL.. Skylab experiment results: hematology studies.
– JW Glasser, HJ Price Evaluating expectations deduced from explicit hypotheses about mechanisms of competition. Oikos, 57-70. 1968. Nueva York NSW, Australia, and Centre for Health Promotion and Research, Sydney, NSW, Australia
-PAVLOV, IVAN PETROVICH (1849-1936

¿Es contagiosa la desgracia?

Robert Saposlsky afirma que las personas que han estado sometidas a un conflicto emocional constante, sea político o social, enferman con más facilidad y mueren más . que las poblaciones que no han sido maltratadas, además, este defecto lo trasmiten a su descendencia hasta la tercera generación. En el dialogo que mantuvo con Eduardo Punset , dice R Sapolsky “ el colectivo mas desamparado de la población trasmite durante varias generaciones la marca de los estragos fisiológicos sufridos por el ejercicio abyecto del poder politico.
Yo me acuerdo siempre de mi tía Juana que descubrió la Inteligencia emocional entre otras cosas. Solía decir, este niño no sirve para estudiar, a el lo que le gusta es estar con gente y hablar y para eso es magnifico. Esto lo dijo Daniel Goleman 50 años mas tarde y por ello vendió millones de libros a gente, que ya sabia esto. Que unos sirven para una cosa y otros para otra y que ser acertado en ejercitar las cualidades positivas nos hace tener triunfos sociales en esta vida. Y en lo referente a Sapolsky, mi querida tía, decía esta Sra; esta sufriendo mucho y esto se paga. Ha sufrido mucho y no se puede estar sana rodeada largo tiempo de sufrimiento.
Perdonen que me aparte del tema, pero mi tía Juana y su marido el tío Alfonso siempre tuvieron visos de genialidad. Ella tenía escasa formación, leía poco y salvo la TV, no tenia otra forma de ilustración, eso si la charla, cada día se reunían sus hermanas y vecinas y disecaban todo lo disecable y montaban el mejor de los ateneos, y eran capaces de entrar en los temas mas escabrosos. Tenían curiosidad. El tío Alfonso leía continuamente, y lo comentaba y lo entendía y sacaba ricas y sabrosas conclusiones. Le asustaba la maldad, era incapaz de entender el daño. El siempre se dio tanto a los demás, que necesitaba muy poco para vivir. Palpaba el amor que todos le teníamos y le tenemos. Con frecuencia decía: “siempre que pasa lo mismo sucede igual”, y mira tu, que hace poco, en un libro entupido de esos que pretenden cambiar tu estado de animo mostrándote frases de los sabios, encuentro una de Einstein que dice: “es un signo de demencia pretender que haciendo siempre lo mismo obtengamos resultados diferentes.”
Creo que esto puede ser lo mismo, aunque habría que discutirlo, pero mi tío Alfonso lo había dicho también hace mucho tiempo y aunque no se había publicado, toda la familia repite esta frase de forma muy jocosa.

Yo también estoy de acuerdo, la gente que sufre, que crece con el estimulo del sufrimiento, incidiendo sobre su sistema emocional, tiene a la fuerza que tener una muesca en alguna parte de su cerebro. Como dicen los fisiólogos ha facilitado determinadas áreas de su cerebro y el sufrimiento lo tienen siempre a flor de piel.

James William discutió muchos años; que era antes la emoción o el sentimiento. También lo discute Damasio y también puedo yo opinar.

Esta claro en unos casos. Someta a unos ratones con escaso cerebro, comparativamente con el homo sapiens sapiens, a un estimulo reiterado. Por ejemplo déle un poco de azúcar cada vez que atraviese un tubo o suba unos peldaños de escalinata, y vera como llegan a hacerlo de una manera prodigiosa y lo que es peor, no se le olvidara jamás.

Seria el movimiento ejecutor de atravesar el tubo, la emoción y el recuerdo que le ha dejado en su psique, el sentimiento. Lo malo del caso es que no siempre se reconoce que el sentimiento ha provocado la emoción y sin embargo la emoción esta allí, y lo esta desde hace años aunque pasa desapercibida y el estimulo que la solicita convirtiéndola en un acto motor, con abundante componente vegetativo, puede estimular cualquiera de las estructuras del lóbulo limbico sin pasar por la corteza cerebral. Por ejemplo a través del haz tálamo-amigdalar, ante, de ser percibido por las estructuras corticales.
Aquí, en el lóbulo límbico, en algún lugar recóndito, debe guardarse el sentimiento de los disgustos que han facilitado una vía y acumularlo en el cerebro de los sufridores, a los que tienen un continuo contacto con la pena. Se pueden olvidar pero nunca desaparecen.

¿Como se puede explicar que lo que ha molestado años, y que no se percibe conscientemente, este dando este continuo, desagradable, amargante y desapacible sufrir, que marca la vida de personas? Parecen estar necesitados de sufrimiento. Como puede ser mayor el miedo a tener dolor, que el tenerlo.

Rodríguez Delgado, siguiendo los trabajos de Hess sobre la estimulación eléctrica del Septum y de la Amígdala, Repitió las sensaciones placenteras o el displancenteras ante la estimulación, dependiendo de la estructura estimulada. Hasta tal punto que coloco electrodos crónicos en estructuras profundas del cerebro a monos, a los que enseño a autoestimularse. Si el estimulo se hacia sobre los núcleos básales del septun o sobre la amígdala, el animal, no solo se enfurecía, sino que no volvía a tocar el manipulador por lo desagradable de la sensación o del sentimiento, no podemos saberlo. Por el contrario, si estimulaba los núcleos de la convexidad del Septum, el placer debía ser tan fuerte que el monito se olvidaba de cualquier necesidad vital que no fuera manipular el interruptor.
Tenemos pues en nuestro cerebro estructuras que responden por lo menos a los estímulos eléctricos con sensaciones de felicidad e infelicidad y que posiblemente necesitan unos neurotransmisores y los receptores de estos para producirse de una manera similar a como lo hace a la estimulación eléctrica..
Pero filológicamente la estimulación no es mecánica sino química y eléctrica y esto también produce una respuesta. De lo que se deduce que cualquier alteración bioquímica de los neurotransmisores, de su recaptación o la de los receptores sobre los que inciden, pueden provocar una sensación, estado de ánimo, sentimiento o todo a lo vez, lejano a la voluntad, y lo que es peor, hacerse la respuesta reiterativa. Ya tenemos una grave y crónica perturbación psíquica. Ya tenemos un obsesivo, un depresivo o un lo que sea, pero anormal. Y sobre todo sin participación de la voluntad. El sujeto esta sometido a los avatares de circuitos previamente facilitados.
L. Pani escribió el año 2000 en la revista Mileniun un atractivo articulo en el que
quiso demostrar que durante generaciones la extraordinaria bioquímica del lóbulo de las emociones estuvo perfectamente modulada por neuromoduladores de los que la DOPA, tenia un lugar preferente. Posteriormente la industrialización y la posibilidad de que determinadas contaminantes, intoxicaran estos neuromoduladores, dio lugar a la aparición de los desordenes emocionales a que estamos sometidos.
Recientemente en Medscape, aparece un trabajo en los que son evaluados campesinos que han estado sometidos a atmosferas de herbicidas, pesticidas y fertilizantes. Estas personas presentan abundantes disturbios de su conducta, como irritabilidad, tendencia a la depresión etc. Esto parece ratificar lo que anteriormente describí del trabajo Milenium.

Esto quizás no tenga nada que ver o si que lo tenga, con el guardar las penas y tenerlas como substrato perturbador. Parece claro que los moduladotes de la neurotranmision están alterados, pero lo que sorprende es que la pena y sus consecuencias para la vida estén archivada en el mensaje cromosómico que dos células, al unirse, trasmiten a su descendencia.
¿Cómo es esto? Después de años de estudio se establecieron las bases químicas de la herencia. . El ADN se transforma en ARN mensajero, este fabrica una proteína y esta a su vez tiene una función. Esto explica que unos padres compartan datos orgánicos con los hijos, ¿ pero hasta la pena? En que letras están escrita en los cromosomas, los disgustos.
Son mensajes a descifrar, pero como muchas veces la clínica aparece mucho antes que descifremos su substrato.
Si esto es así, y lleva visos de serlo. “Santa María lo que nos queda”. Ya no se pueden dar ni disgustos, porque estas personas morirán antes, enfermaran mas y además lo transmitirán a los que nada tenían que ver con el conflicto. Habrá que poner en práctica el primer principio de la Constitución América. “El primer deber de un Estado es hacer felices a los Ciudadanos”.

CEREBRO Y EMPATIA

Dr Enrique Rubio García

El Cerebro es una de las maquina mas complejas que existe en el universo y es el portador de la mente, donde se elaboran las funciones superiores. Nuestro cerebro es la suma de los cerebros de los animales que nos han precedido en la evolución y es seguro que va a continuar evolucionando
Básicamente, el cerebro es una máquina predictiva encaminada a reducir la incertidumbre del entorno. El origen del concepto de ‘teoría de la mente’ se encuentra en los trabajos pioneros de Premack y Woodruf y se refiere a la habilidad para comprender y predecir la conducta de otras personas, sus conocimientos, sus intenciones, sus emociones y sus creencias
La vida psíquica es el esfuerzo permanente entre dos cerebros. Un cerebro emocional inconsciente, preocupado sobre todo por sobrevivir y ante todo conectado al cuerpo.
Un cerebro cognitivo, consciente, racional y volcado en el mundo externo
Estos dos cerebros son independientes entre si, cada uno de ellos contribuye de manera muy distinta a nuestra experiencia de vida y a nuestro comportamiento
El cerebro funciona bien cuando gestiona automatismos. Respirar, andar, ingerir alimentos. Pero cuando entran en acción los pensamientos, la imaginación, el razonamiento, las emociones o las intuiciones, el mundo parece derrumbarse y sobe todo.

“Para que un cerebro funcione bien tiene que estar sano”
“La educación de un cerebro enfermo no proporcionara empatia”

La evolución de la tecnología durante un siglo nos ha sorprendido al mundo científico. Hemos pasado del pizarrín al ordenador y del caballo a los más rápidos medios de locomoción y están al alcance de gran parte de los ciudadanos del mundo. Sin embargo las relaciones sociales aunque también han mejorado están muy lejos de ser las deseadas.
En un siglo, hemos duplicado nuestra supervivencia, hemos pasado de pasar hambre a hacer dietas para adelgazar. Las enfermedades empiezan a conocerse y a tratarse eficazmente, aumentan la población con estudios superiores, conocemos mejor los idiomas, los trabajos empiezan a perder su severidad y en general son mejor soportados.
Lógicamente esto debía ser un motivo de bienestar. Pues no, no ocurre así.
Las guerras y sobre todo de religión persisten y en algunos lados como la orilla norte del mediterráneo se extienden y nos asustan con que se generalicen a nuestros territorios. El paro diezma a occidente y su solución se escapa a nuestros poderes. La violencia de género, los especuladores y ladrones y todo un conjunto de maldades nos angustian y nos hacen enfermar sobre todo psíquicamente. En occidente un tercio de la población padece algún tipo de alteración psíquica.
Haciendo un análisis retrospectivo, la segunda guerra mundial fue un paradigma de la maldad. No solo murieron la terrible cifra de 53 millones de personas, sino que el holocausto se comporto de la forma mas vil que se puede concebir y lo hicieron no solo, Alemania e Italia, sino que le ayudo Francia que ahora pide perdón a los Judíos por su terrible comportamiento. De la misma forma en Ruanda las mantanza de los Hutus y Tutsis Videla en Argentina o la de Camboya. Terribles genocidios perpetrados por ciudadanos cultos y cuyo ambiente educacional era optimo y por otros salvajes sin ningún tipo de educación. Ambos grupos fueron malos, terribles. Seguían el pensamiento de Nietzsche. “La crueldad es uno de los placeres mas antiguo de la humanidad. No hay que tener piedad. El propio presidente de Francia ha dicho recientemente. “como un país como Francia que introdujo las libertades colaboro en el holocausto”. Una de las veces que fui a Buenos Aires acompañado por un amigo de aquel país, pasamos por delante de la escuela de mecánica de la armada y el me dijo., “Aquí fueron muertos y torturamos miles de Argentinos sin culpa alguna. Lo sabíamos todos y miramos hacia otro lado”
Es necesario acordarse del escrito de Martin Niemoller, pastor luterano falsamente atribuida al poeta Bertolt Brecht.
El amor al prójimo no conoce limites ideológicos ni confesionales
Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas
guarde silencio
Porque yo no era comunista
Cuando encarcelaron a los socialdemocratas
guarde silencio
porque yo no era socialdemócrata
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas
no proteste
porque yo no era sindicalista
Cuando vinieron a buscar a los judios,
no pronuncie palabra
Porque yo no era judio
Cuando finalmente vinieron a buscarme a mi
no habia nadie mas que pudiera protestar.
Al lado de estas crueldades una serie de personas, también de distintos niveles sociales y educacionales, se esforzaron hasta la heroicidad por ayudar a los judios.
El famosos Oskar Schlinder, industrial alemán que salvó a 1.100 judios empleándolos en sus fabricas de forma ingeniosísima, o de nuestro diplomático aragonés Angel Sanz Briz, que falsificando certificados y desafiando la ira del monstruo alemán, salvó de la muerte a 4000 judios. Otros muchos hicieron los mismo como el famosos Raoul Wallmberg que comprometio repetidas veces su vida por salvar judios y que preguntado al final de la guerra por su proeza, contesto “para mi no había elección”.
Pero acerquémonos a nuestro entorno. Santa Angela de la Cruz, que en tiempos de terrible carestía, hambre y epidemias, dio de comer buscando entre lo imposible a multiples, pobres, los cuido hasta su muerte y sus hijas siguen siendo un modelo de amor. En la actualidad cientos de personas, dan su dinero su esfuerzo y su anonimato para dar de comer a los que no tienen fortuna, por el terrible paro, por los banqueros sin escrúpulos y por los que les arrebataron fraudulentamente su dinero dejándolos en la indigencia.
Son muchos y les pido perdón por no mencionarlos a todos y a cada unos de ellos, pero ellos saben que están en nuestro corazón y tienen nuestro agradecimiento. Son héroes y espero tengan su premio.
Estos últimos siguen otro mensaje, el de Jesús de Nazaret “ Amad a vuestros enemigos y rogad por los que os persiguen”. Mucho tiempo antes Confucio dijo “La naturaleza humana es buena y la maldad es esencialmente antinatural”.
Como podríamos explicar estas dos actitudes tan dispares, científicamente.
Ponerse en el lugar del otro, escuchar antes que hablar, reconocer los sentimientos individuales de cada uno en el otro. La empatia hacia las posibles victimas nos hace compartir la angustia de quienes la sufren, de quienes están en peligro o de quienes están desvalidos y nos impulsa a ayudarlos
La empatia esta producida por unas neuronas llamadas en espejo que se alojan preferentemente en la corteza de los lóbulos frontales y parietales del ser humano y dudosamente la poseen los prehomínidos
Las neuronas en espejo son células del cerebro que se activan cuando hacemos algo y también cuando observamos a otra persona o animal realizando la misma acción.. Fueron descubiertas por neurofisiologos Italianos. Estas neuronas en espejo controlan nuestros movimientos y además responden de forma específica a los movimientos e intenciones de movimiento de otros sujetos. Y no sólo responden a los movimientos de otros, sino que participan en la generación de nuestros propios movimientos.
Dice Mario Lacoboni que “ Las neuronas en espejo son los diminutos milagros gracias a los cuales atravesamos el dia”.
¿ Es esto lo que nos hace buenos o malos?. Seguro que es solo parte de una amplia organización neurofisiologíca cerebral, pero parte imprescindible. Lo que no parece intervenir es la educación. Ambos grupos educados y no educados se comportaron igual ante la maldad. Esto debe alegrarnos, es patología del cerebro y podemos estudiarla como las demás enfermedades. No es la maldad sino la reacción de un cerebro enfermo
Hoy sabemos que determinadas personas carecen de estas células y están perfectamente tipificados. Psicoticos, algun tipo de autista, personas que han padecido un traumatismo cerebral importante Los agentes externos tales como los manipuladores de cerebro, la polución ambiental, el estrés continuado, los virus que continuamente viven en nuestro cerebro son causantes de la inactivacion o destrucción de estas celulas y en consecuencia de la falta de empatia.
Los divulgadores de las ciencias están acertadamente difundiendo el concepto de empatia. La sociedad al conocer mas detenidamente este problema exigirá, tal como esta haciendo con los problemas cardiacos y vasculo cerebrales a los científicos que tenga una especial atención en la empatia y su fisiología cerebral.
No es un mensaje negativo el que intento mandar, por el contrario es una alegría saber que no somos tan malos, dejar de autoculparnos cuando nos portamos mal.. Es una enfermedad y seguro que como a tantas otras podremos prevenirlas y tratarlas..

La inmunidad potenciada en a enfermedad de Alzheimer por la Vit. D3

La Vitamina D3 ayuda a eliminar las proteina amiloidotica en la enfermedad de Alzheimer potenciando el sistema inmunitario de los macrofagos
La falta de un tratamiento eficaz en una enfermedad en la que el agente infecciosos empieza a darse como productor evidente, nos anima a pensar que al menos es posible la potenciación del sistema inmunitario de una forma tan facil como aportar vit D3
Parece no caber duda que la dieta mediterránea y el ejercicio fisico por lo menos retrasan la evolucion de EA.
El sello mas caracteristico de la EA es el deposito de proteínas en el cerebro y de ellas la mas abundante es la amiloidotica Ap-42. Recientemente «, Milán fiala, MD, de la Escuela de Medicina David Geffen en la Universidad de California en Los Ángeles, Alz Dis. 2012;29:51-62. Abstract y divulgada a travez de Medscape por Megan Brooks ( Studies Show How Vitamin Helps Clear Amyloid in AD March 15, 2012). «La Dra. Fiala afirma que la vitamina D3 protege al cerebro a través del sistema inmunológico siempre que se mantengan altos niveles de Vita D3 (25-hidroxi vitamina) independientemente de la falta de sol » El estudio también apoya la creciente evidencia de que los niveles adecuados de vitamina D «puede ser un factor clave en la prevención de la EA», dicen los investigadores. Su trabajo fue publicado 6 de marzo en el Diario de la Enfermedad de Alzheimer.
Los macrófagos inmunes innatos son necesarios para el aclaramiento de la proteina AP-42 y para el mantenimiento de la función normal del cerebro. Este proceso de fagocitosis es defectuoso en los pacientes con EA.
En estudios de laboratorio anteriores, el Dr. Fiala y sus colegas identificaron 2 tipos de macrófagos en los pacientes con EA, macrófagos tipo I y tipo II. Ellos encontraron que la función de los macrófagos de tipo I puede ser mejorada mediante la adición de vitamina D3 y curcuminoides, una forma sintética de la curcumina, un compuesto químico presente en la especia cúrcuma. Los macrófagos tipo II por otro lado, se mejoran solamente por la adición de vitamina D3. Sin embargo, el mecanismo exacto de estos efectos sigue sin estar claro, hasta ahora.

Fig1, macrofagos de la EA sin Vita D Fig 2 con vit D, captan mas AP-42

En sus últimos estudios de laboratorio, el equipo aisló los macrófagos de las muestras de sangre tomadas de pacientes con AD y controles sanos. Se incubaron las células durante la noche con Ap-42, algunos en presencia de la vitamina D3 y / o curcuminoides y observaron que la vitamina D3 activa un canal especifico del cloro, CLC-3,
Se desprende de este trabajo que la vitamina D3 puede «sintonizar de nuevo los macrófagos para fagocitar la Ap-42 soluble en la AD mediante la regulación de la función de ambas proteínas extranucleares (es decir, la señalización no genomica, sino la potenciacion del sistema inmunitario imnato y parece que las formas activas de la vitamina D «atenuan los efectos nocivos de la Ap-42 en la señalización celular en las neuronas corticales y células inmunes.» Estos hallazgos apoyan la «recientes especulaciones de que la suficiencia de vitamina D puede ser un factor clave en la prevención del Alzheimer», aunque la adicción de Curcuminoides sólo activa débilmente este canal de cloruro, y sólo en el tipo I de los macrófagos.
La vitamina D3 también ayuda a activar la transcripción genética del canal de cloro y el receptor de la vitamina D3 en los macrófagos de tipo II.

Se pidieron comentarios a David J. Llewellyn, PhD, de la Universidad de Exeter, dijo: «Este estudio esclarecedor se suma a la evidencia emergente que la vitamina D puede desempeñar un papel neuroprotector importante en el ser cerebro humano «.

El Dr. Llewellyn y sus colegas recientemente aportaron a Medscape evidencia que la deficiencia de vitamina D se asocia con un mayor riesgo de deterioro cognitivo en personas de edad avanzada. Los suplementos nutricionales con vitamina D3 también se ha demostrado que protege contra el declive cognitivo en los ancianos.

La relacion con la alimentación de las enfermedades demenciales son motivo de un continuo comentario, aunque ninguno parece interesarse por su primera etiologia que muy posiblemente esta en el virus del herpes tipo 1. No cabe duda que este germen nos afecta muy precozmente y habita en un alto porcentaje de cerebros de personas mayoresl, después sigue un curso tórpido y y dependiendo de nuestra inmunidad y de estrés adquiridos, se reactiva el virus y el fenomeno inflamatorio cerebral en general
No obstante estas son las armas que tenemos en la actualidad y hay que usarlas

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